DÍA 8. SKOPJE-RESERVA JASEN-SKOPJE. 170 KM
Jornada de ida y vuelta, se torcieron los planes de nuevo.
Sería ideal circular siempre por prados adornados con florecillas y con un pintoresco horizonte al fondo,
pero a menudo ruedas por secarrales siguiendo feas torres de alta tensión, y gracias.
La cuestión es avanzar, y aquella mañana lo hice por las suaves colinas al sur de Skopje cubiertas por las hierbas del verano.
Hubo
de todo: caminos borrosos, algo de campo a través, un senderillo fácil,
carretera, y al final, el abismo sobre el embalse Kozjak.
Nubes
de tormenta a mediodía no presagiaban nada bueno para la tarde, debí
darme cuenta. Desde mi atalaya escuché ruido de monocilíndrico 4t, y a corta
distancia pude distinguir una moto naranja dando vueltas por un prado,
así que me fui a investigar. Allí estaban Antonio, Kristjian, Stefan y
otros aficionados al motociclismo dando una vuelta con sus máquinas.
La
moto naranja resultó no ser una ktm, sino una Zongshen 125 que armaba un
escándalo perfectamente audible en la soledad que nos rodeaba. Hubo sesión de fotos, asesoramiento geográfico, intercambio de direcciones, comparativas de precios, ciclindradas, etcétera.
Kristjian
me pidió la DRZ para darse una vuelta y, tras asesorarle sobre los
traidores efectos del equipaje sobre la manejabilidad de la moto,
arrancó y desapareció por el pinar.
Esta
gente ya tenía el veneno en la sangre, pero a alguno, después del paseo
con una moto "grande" creo que no habrá antídoto en el mundo para
curarle.
Instintivamente continué mi ruta cuesta abajo hacia el pantano porque
creí recordar que el track lo había trazado por allí, pero estaba muy
equivocado. Tuve que volver sobre mis pasos y después afrontar un
senderillo hasta una cresta, momento en el que me rajé. Ignoraba que el
sendero era muy breve y que enlazaba inmediatamente con una pista; en
fin, son los problemas inevitables de llevar tantos tracks en la cabeza y
de ir improvisando con lo que surgiera cada día.
En otro pinar
con vistas al Kozjak Jezero encontré a un par de jubilados que andaban
recogiendo hojas de té y les pregunté por mis posibilidades de seguir
camino hacia el sur. La anciana enseguida tomó el mapa y le echó un
vistazo con gran interés.
-Aaaah, topografika karta.
La señora había trabajado en Alemania en los años 70 y yo algo había estudiado en los 90, y chapuceramente pudimos comunicarnos.
-Autobahn kaputt in der Dam ist?
Se
confirmaron mis temores: entendí que la carretera moría en las
instalaciones de la presa, y que más adelante solo encontraría un retén
policial y una senda que rodeaba el lago, pero tan escarpada que de
ninguna manera podía pensar en pasar por allí con la moto.
Aún me
quedaba una posibilidad de enlazar más adelante con mi track vía
carretera terciaria pasando por Nova Breznitsa, donde me topé con este
letrero:
Tenía
toda la pinta de que la carreterilla que debía llevarme hasta
Makedonski Brod era de uso restringido y con unos horarios más bien
descerebrados: a las 9 am bajaban la barrera y no habrian otra vez hasta
las 4pm. Serían las 12 de la mañana y no me iban a dejar pasar, pero
aún así lo intenté. La barrera me la encontré unos 10 kms después:
Una
gran reserva natural, la reserva Yassen, se interponía en mi camino.
Aunque Hice mi papel de turista despistado los guardias fueron
inflexibles e insistieron en que había que cumplir con los horarios.
Volví a las 4, pero antes de llegar al puesto de los forestales los
cumulonimbus ya estaban muy crecidos y vi cómo empezaban a caer rayos a
los lejos. Tocaba retirada: pasaría una segunda noche en Skopje,
madrugaría y a la mañana siguiente estaría en la puerta de la reserva a
las 9am como un clavo.
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